EL PEOR ENEMIGO DE LAS LACTANCIAS EN EL MUNDO

Durante tu lactancia, ¿alguna de estas ideas ha pasado por tu mente?:

“Mi bebé llora porque se queda con hambre”
“Creo que no lleno a mi bebé, porque me pide pecho constantemente”
“Me han dicho que debo “completar” la toma con un biberón con fórmula”

Si es así, tal vez eres víctima de EL PEOR ENEMIGO DE LAS LACTANCIAS EN EL MUNDO

El enemigo número uno de las lactancias en el mundo es: LA PERCEPCIÓN DE INSUFICIENCIA DE LECHE (PIL).

Regina María Roig-Romero, IBCLC (consultora de lactancia internacional), con 20 años de experiencia en la asesoría, docencia y atención a la lactancia, se dio cuenta que este era un tema recurrente en las mamás que ha atendido durante toda su carrera, así que decidió hacer un acucioso estudio recabando la información que hay sobre el tema a nivel mundial.

Y se encontró que desde 1980 (en el boom de las leches artificiales), hay referencias a esta problemática en 19 diferentes estudios, corridos en 12 países y repartidos en los 5 continentes. Lo que lo convierte en una preocupación de las madres lactantes alrededor del mundo.

Pero, de qué hablamos cuando nos referimos al PIL?

La Percepción de Insuficiencia de Leche, es la creencia de las madres de que no tienen leche materna suficiente para satisfacer las necesidades biológicas y nutrimentales de su bebé.

La conclusión del estudio de Roig-Romero (2012), es que la PIL, es el resultado de la brecha entre la Realidad y la Expectativa o Necesidad Maternal.

Y que se desarrolla debido principalmente a:
1. Conductas del bebé después de haber sido amamantado
2. Percepciones maternales
3. Creencias del entorno en el que se desarrolla la diada mamá-bebé

1. Conductas del bebé después de haber sido amamantado
   Es decir, se suele interpretar algunas conductas comunes de los bebés como atribuibles a la insuficiencia de leche como: toda demanda de chupar, se llevan la mano a su boca, llora, duerme poco, sólo se consuela al pecho, pide pecho constantemente. Por estas descripciones, es que en México, el 50% de las lactancias son abandonadas a los 2 meses y el 80% a los 4 meses (Escamilla).

Sin embargo, todas estas conductas en los bebés están más relación con la etapa que atraviesan donde “conocen” el mundo a través de las sensaciones orales. Además, el pecho de la madre, no sólo brinda alimento, también proporciona consuelo, cercanía con la mamá. Los bebés gozan de estar en contacto con el seno materno, ya que como mamíferos que son, lo reconocen como su medio ambiente natural.

Otra gran estudiosa de la lactancia, Maureen Michin, formadora de cientos de consultoras internacionales señala: “los bebés que son portados en rebozos o fulares (cada cultura ha desarrollado el cargador ideal para sus necesidades), lloran mucho menos, comen sólo lo que necesitan para nutrirse, pues la búsqueda del consuelo ya lo tienen y no requieren mayor derroche de gasto energético para mantener su temperatura, ya que ésta es regulada por la madre”.

2. Percepciones maternales
   Percepciones de la madre sobre su lactancia ya sea debido a su sistema de creencias, a sus emociones o a la percepción del estado de su salud.
   Cuando mencionamos su sistema se creencias, las asesoras de lactancia es común que escuchemos frases como: “en mi familia, ninguna de las mujeres hemos tenido leche” o “en la familia ninguna hemos podido amamantar”. En referencia a sus emociones, oímos frases como: “voy a amamantar… si puedo”.

La mayoría de las madres puérperas, cursan por ajustes hormonales que les hacen dudar de su eficiencia como mamás, tienen baja autoconfianza en sí mismas y en sus habilidades. Esta situación es tan delicada, que incluso si un 82% de las madres tienen intención de amamantar, aproximadamente al mes, el 73% de estas mismas madres tienen PIL (y comienzan con la introducción de biberones con fórmula, que en corto tiempo, termina con la lactancia), como lo asienta uno de los estudios realizado en Japón.

Y estas situaciones atribuibles a la madre, muchísimas veces son agravadas con el siguiente punto:

3. Creencias del entorno en el que se desarrolla la diada mamá-bebé.
   9 de los 19 estudios revisados por Roig-Romero, señalaban que la Percepción de Insuficiencia de Leche se debía a la falta de apoyo social: desaprobación de la familia; mamá rebasada por tareas y responsabilidades; opinión desinformada de personal de salud y padres.

Es decir, desde la familia que se avienta comentarios como: “ninguno de nosotros ha sido amamantado y crecimos muy bien” (aunque las tasas de diabetes, obesidad y enfermedades crónico degenerativas en nuestros país tengan tasas alarmantes de incremento en las últimas tres décadas). O la mamá que no tiene ningún apoyo en el hogar para realizar las tareas de limpieza, alimentación y cuidado de la familia, sobre todo si cuenta con más de un hijo.

Y la peor y más condenable: la falta de formación y actualización en lactancia en el personal de salud, que con la mayor facilidad prescriben la utilización de leche artificial antes de enseñarle a la mamá sobre cómo mejorar su lactancia y los riesgos de no amamantar.

¿Cómo combatir la percepción de insuficiencia de leche?

Si has identificado alguna de estas situaciones en tu lactancia, puedes combatirla:

Con INFORMACIÓN actualizada, científica y veraz.

Y APOYO familiar y profesional.

Asiste a cursos de lactancia con tu pareja y ponte en contacto con una asesora de lactancia (477 674 9021) o grupo de apoyo a la lactancia (en León y en Guanajuato Capital)

¡La PIL es reversible!

#x1MexicoSano

Texto publicado en http://zonafranca.mx/que-es-la-percepcion-de-insuficiencia-de-leche/

11 FEBRERO, 2017 

Miriam es mamá, esposa, asesora de lactancia, bloguera, practicante de Reiki y ZhiNeng QiGong, comunicóloga, especialista en Desarrollo Humano y máster en Facilitación de Grupos con enfoque Gestalt.
Whatsapp: 477 674 9021